El Instituto Secular de las Misioneras de la Realeza de Cristo nació en Asís el 19 de noviembre de 1919, gracias a la experiencia espiritual de Armida Barelli y la intuición de padre Agostino Gemelli ofm.
Desde el principio, el carisma del Instituto ha sido aquello de la laicidad, vivida en la Iglesia y en el mundo, “desde dentro de la historia”, siguiendo a Cristo pobre, casto y obediente, para testimoniar el Evangelio en las cotidianas condiciones de vida.
La plena secularidad y la experiencia de San Francisco de Asís inspiran y apoyan el deseo de vivir el Evangelio “sine glossa”, en medio de todos los hombres y mujeres de su propio País y de su propio tiempo, sin signos distintivos y vida común, eligiendo el estilo de minoridad y servicio.
El Instituto, extendido en muchos Países del mundo, es reconocido por la Iglesia y pertenece a la gran familia franciscana.